Elecciones en España: izquierda versus derecha
Compartir

España - El Congreso de los Diputados. (Foto Pool Moncloa / Fernando Calvo)

por Pilar VALERO

Madrid, 20 de marzo 2019 (LatinReporters.com) - “Izquierda versus derecha” retrata el ambiente de una España, más polarizada que nunca desde la muerte de Franco, llamada a votar en las elecciones generales del 28 de abril.

El rechazo por el Congreso de los Diputados, el 13 de febrero, del presupuesto 2019 presentado por el gobierno socialista de Pedro Sánchez justificó la convocatoria de estas elecciones anticipadas. Negándose a reconocer el derecho de Cataluña a la autodeterminación, Sánchez había perdido el apoyo decisivo de los diputados independentistas catalanes.

Las dos Españas, representadas mayoritariamente por el gubernamental Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Sánchez y el conservador Partido Popular (PP) de Pablo Casado, se enfrentan ahora en una agria campaña en la que los políticos apelan a los sentimientos más que a la razón o a los programas.

Una estrategia electoral en busca de voto emotivo parece calar con mensajes muy simples, exageraciones e incluso insultos o afirmaciones falsas que aunque algunos medios de comunicación desmienten con datos, no se retiran y siguen circulando en las influyentes redes sociales.

Irrupción de la extrema derecha

Campaña de nervios en los cuarteles de los partidos y que altera a la ciudadanía porque los sondeos pintan un panorama incierto que confirma que la muerte del tradicional bipartidismo PSOE-PP dará paso a un Parlamento muy fragmentado.

La gran novedad es la probable fuerte irrupción a nivel nacional del ultraderechista Vox, formado en 2013 por ex-militantes del PP nostálgicos del franquismo. Este partido airea un mensaje xenófobo y homófobo y plantea la derogación de la ley de violencia de género, la venta libre de armas de fuego e incluso ilegalizar partidos en función de su ideología.

Los dirigentes de Vox se declaran admiradores del presidente estadounidense, Donald Trump, y del brasileño Jair Bolsonaro, con los que comparten un discurso populista, ultranacionalista y la teoría de que el actual sistema político esta superado.

El socialista Pedro Sánchez, presidente del gobierno español, en Madrid el 19 de marzo 2019. (Foto Pool Moncloa / Fernando Calvo)
Aunque las encuestas electorales sitúan como primera fuerza a los socialistas seguidos de los populares, coinciden en que ambos necesitarían alianzas para formar gobierno y ahí radica la gran batalla que decidirá el destino político de España en los próximos años.

Sánchez lidera desde el pasado junio un frágil gobierno minoritario tras derribar en una moción de censura al conservador Mariano Rajoy acorralado por una sentencia que certificó que el PP se benefició de millonarias comisiones ilegales a cambio de contratos públicos y que las ocultaba en una contabilidad paralela.

Para alcanzar la presidencia del gobierno, con sólo 84 escaños de los 350 que forman el Congreso, Sánchez necesitó los votos de la izquierda radical de Podemos, de separatistas catalanes y de nacionalistas vascos, un apoyo que podría de nuevo ser crucial para seguir en el Palacio de la Moncloa.

Precisamente esos apoyos y la apertura de un diálogo con los partidos independentistas catalanes es el más recurrente ataque electoral de la oposición de derechas contra Sánchez culpándole de ser un aliado de los que dicen quieren “romper España”.

(Publicidad)

Ante esos reproches que calan en buena parte de la ciudadanía, Sánchez asegura que con un gobierno del PSOE “nunca se va a producir la independencia de Cataluña” pero que mantendrá su oferta de diálogo dentro de la Constitución para mejorar la convivencia.

La campaña electoral coincide con el juicio a doce políticos catalanes por la organización del referéndum ilegal independentista del 1 de octubre de 2017 y por el que se enfrentan a graves acusaciones de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos.

Los conservadores cada vez más radicalizados de Pablo Casado parecen inclinarse por un futuro pacto de gobierno con los liberales de Ciudadanos y los ultraderechistas de Vox, generalizando la alianza que forjaron los tres para tomar el control del gobierno regional de Andalucía el pasado diciembre.

El bloque progresista alerta sobre tal eventual gobierno "Francostein", replicando así a lo que los conservadores llaman el gobierno “Frankenstein” del socialista Sánchez debido al apoyo que recibió de independentistas catalanes, nacionalistas vascos y populistas de izquierda.

Un mes después de las legislativas, a votar otra vez

A la vista de la previsible dificultad de formar mayorías y para huir de los extremismos, algunos analistas apuestan por un pacto de gobierno entre socialistas y liberales (PSOE y Ciudadanos), rechazado sin embargo por el líder liberal Albert Rivera, furibundo contra el socialista Sánchez por su diálogo con independentistas. Además, como el PP, Rivera no quiera encerrar a Vox en un “cordón sanitario”.

El 26 de mayo, un mes después de las legislativas, los españoles votarán de nuevo en elecciones municipales, regionales y europeas y se completará así el nuevo mapa político de España.

Y al margen de las enconadas peleas partidistas, el potente movimiento feminista de carácter transversal que sorprendió con manifestaciones masivas el 8 de Marzo reclamando igualdad de derechos es un aviso en toda regla de que el voto de las mujeres puede ser decisivo en este agitado maratón electoral.

Compartir

LE PUEDE INTERESAR :